La UCA se propone responder a los desafíos del mundo actual aportando lo que le es propio en cuanto a:
Universidad: Trabajando a través de la investigación, el pensamiento y la docencia al servicio del hombre.
Para ello, promueve el examen de la realidad con los métodos propios de las distintas disciplinas y las integra en el necesario diálogo entre fe y razón. Tal integración insertada en las ciencias no es una cuestión meramente epistemológica, es fundamentalmente una inserción en la realidad.
La búsqueda constante de calidad y excelencia desde el punto de vista académico garantiza la formación de profesionales capaces, a cargo de docentes dispuestos a perfeccionarse y actualizarse permanentemente y volcados a la investigación que aporte soluciones a la problemática del país.
Católica: Como tal, procura guardar su identidad y mantener una presencia viva de la Iglesia y su mensaje de salvación en la universidad y en la cultura. Actuar conforme a los valores cristianos traducidos en una ética en el modo de relacionarse, significa un compromiso que se adquiere para toda la vida y se proyecta en lo personal y en lo social.
La Universidad Católica es una universidad abierta que busca enriquecerse en la diversidad y en el diálogo respetuoso, que trata de formar no solamente al profesional eficiente que aporta soluciones técnicas a los problemas de la comunidad, sino también al ciudadano y al dirigente honestos.
Argentina: Se propone dar respuesta a las necesidades del hombre de hoy, con rostro visible, inserto en la nación y en el mundo. La Universidad debe estar presente en los más diversos ámbitos ofreciendo respuestas desde la docencia, la investigación y la reflexión y no perdiendo jamás de vista que ellas cobran verdadero sentido cuando pueden aplicarse a los desafíos concretos.